Sandra había asumido sola el cuidado de su hija tras la separación. Al principio, su expareja cumplía con la cuota alimentaria acordada, pero con el tiempo dejó de aportar, afectando la alimentación, educación y bienestar de la niña. Cada mes sin recibir lo pactado significaba nuevas preocupaciones y sacrificios.
Como Sandra, muchas madres y padres se ven obligados a luchar solos para garantizar los derechos de sus hijos.
En LEXAR CONSULTING, entendemos la angustia que genera el incumplimiento de las obligaciones alimentarias.
Por eso, ofrecemos un acompañamiento jurídico cercano y especializado, actuando con celeridad para asegurar que los menores reciban lo que por derecho les corresponde.
Nuestro servicio:
No permita que la falta de cumplimiento afecte a sus hijos. Confíe en LEXAR CONSULTING para proteger sus derechos.
Agende su asesoría hoy mismo.